ENFERMEDAD DE ALZHEIMER

 

 

FACTORES DE RIESGO

Los factores de riesgo de la enfermedad de Alzheimer pueden sintetizarse en:

  • Factores genéticos
  • Factores demográficos
  • Antecedentes médicos

Factores genéticos

  • Historia familiar: un familiar cercano (padre o hermano) que haya padecido la enfermedad de Alzheimer, constituye un factor de riesgo.
  • Mutaciones causales: poseer una mutación es causa suficiente para desarrollar la enfermedad y ésta será de inicio precoz. Estas mutaciones, que sólo representan el 1% de los casos, pueden situarse en:
    • Gen de la proteína precursora del amiloide (APP).
    • Gen de la presenilina 1 (PS1).
    • Gen de la presenilina 2 (PS2).
  • Genotipo APOE: La proteína APOE puede presentarse de 3 formas distintas (ApoE-e 2, ApoE-e 3, ApoE-e 4). La ApoE-e 4 constituye un factor de riesgo, que en este caso será de inicio tardío.
  • Síndrome de Down: existe una relación clara entre el síndrome de Down y la enfermedad de Alzheimer. Estas personas muestran a los 40-50 años lesiones características de la enfermedad.
 

Factores demográficos

  • Edad: es el principal factor de riesgo para la aparición de la enfermedad. A partir de los 65 años la EA aumenta exponencialmente, duplicándose cada cinco años.
  • Género: las mujeres presentan una mayor incidencia. Etnia y nacionalidad: varía entre regiones y sociedades
  • Nutricionales: las dietas hipercalóricas y las ricas en ácidos grasos saturados, la obesidad y la ingesta excesiva de alcohol suponen un factor de riesgo.
  • Medio rural: el pertenecer a familias con condiciones poco favorables, económicas, sanitarias, nutricionales, etc., puede favorecer a que la educación y maduración cerebral sea menor, limitándose por ello la reserva cerebral. A
  • Actitud existencial: las personas con tendencia al optimismo presentan un menor riesgo.

 

 

Antecedentes médicos

  • Depresión: puede manifestarse en forma de demencia y puede ser uno de los primeros síntomas de la enfermedad.
  • Menopausia, andropausia: está demostrado que el uso de terapias hormonales sustitutivas en mujeres previene ante el riesgo de padecer la enfermedad.
  • Hipertensión arterial e hipercolesterolemia: ambos son factores de riesgo porque pueden producir lesiones cerebrales vasculares.
  • Hiperhomocisteinemia, deficiencia en vitamina B12 y folatos.
  • Toxicoambientales: distintos productos tóxicos pueden contribuir a la aparición de la enfermedad, tabaco, insecticidas, fertilizantes, etc.