EL PAPEL DE OTROS FACTORES DE RIESGO EN LA EVALUACION DEL RIESGO

Esta guía reconoce que el riesgo de enfermedad coronaria está influenciada por otros factores no incluídos entre los factores más importantes e independientes de riesgo (Tabla 3). Entre estos factores están los debido al estilo de vida y otros factores emergentes. Entre los primeros se incluyen la obesidad, la inactividad física y la dieta aterogénica. Los últimos consisten en lipoproteínas, homocisteina, factores protrombóticos y proinflamatorios, glucosa alterada en ayunas y evidencia de enfermedad arteriosclerótica subclínica.

Los factores relacionados con el estilo de vida son objetivos directos para una intervención clínica, pero no se usan para determinar los valores de las LDLs que deben alcanzarse. Los factores de riesgo emergente no modifican de forma categórica los objetivos a alcanzar con las LDLS, pero parecen contribuir de alguna manera a la enfermedad coronaria y pueden ser de utilidad en algunas personas para establecer un tratamiento encaminado a reducir el riesgo. Su presencia puede modular el juicio clínico al establecer una decisión terapeútica.

SINDROME METABOLICO

Muchas personas presentan una constelación de factores de riesgo importantes, factores relacionados con el estilo de vida y factores emergentes que constituyen el llamado síndrome metabólico. Las características más importantes del síndrome metabólico son la obesidad abdominal, dislipidemia aterogénica (triglicéridos elevados, pequeñas partículas de LDLs, bajas HDLs), presión arterial elevada, resistencia a la insulina (con o sín intolerancia a la glucosa) y situación protrombótica y proinflamatoria. Esta guía en su versión III reconoce el síndrome metabólico como objetivo secundario de la terapia reductora del riesgo a continuación del objetivo primero de reducción de las LDLs. El diagnóstico y tratamiento del síndrome metabólico se describe en el apartado "Beneficios de la reducción de las LDLs: el Síndrome Metabólico como objetivo secundario de tratamiento"

RELACION ENTRE LA EVALUACION DEL RIESGO Y EL COSTE/EFECTIVIDAD

En la versión III de esta guía, el objetivo primordial es ajustar la intensidad de la terapia reductora de LDLs con el riesgo absoluto. Cualquier persona con LDLs elevadas deberá ser tratada con cambios en el estilo de vida que son eficaces reduciendo las LDLs. Las personas con riesgo elevado también son candidatas a un tratamiento farmacológico que es muy efectivo, pero que supone un coste económico. Los valores a partir de los cuales se recomienda un tratamiento farmacológico están basados en consideraciones riesgo/beneficio. Los sujetos con mayores riesgos son, obviamente, los que obtendrán mayores beneficios. Sin embargo, los valores a partir de los cuales se debe considerar un tratamiento con fármacos están también basados en consideraciones económicas. Los cambios en el estilo de vida son los más efectivos para la reducción del riesgo de enfermedad coronaria cuando se considera la razón coste/beneficio. Sin embargo, muchas personas requieren, además, fármacos reductores de las LDLs, fármacos cuyo coste predomina en el coste total de una tratamiento hipocolesterolemiante. Sin embargo, los precios de los fármacos reductores de las LDLs están disminuyendo y esta tendencia parece ser la tónica de los próximos años. Esta guía reconoce que, a medida que los precios de los fármacos hipolipemiantes vayan disminuyendo, será posible amplir su utilización a otros enfermos, manteniéndose la razón coste/beneficio a niveles estándar. Además, algunos enfermos con alto riesgo a largo plazo son candidatos a un tratamiento farmacológico aún cuando inicialmente el coste sea superior a considerado usualmente como estándar.