La tiamina, también denominada vitamina B1, fue la primera vitamina cuya estructura química fué determinada (*). La tiamina, en forma de tiamina trifosfato o cocarboxilasa, es un cofactor enzimático imprescindible en el metabolismo energético y en la síntesis de las pentosas. Por este motivo, en la deficiencia de tiamina, la capacidad celular para la generación de energía se ve seriamente comprometida. La tiamina en forma de pirofosfaro participa activamente, conjuntamente con la transcetolasa, en la conversión de la ribulosa a ribosa, única vía metabolica de producción de la ribosa, pentosa necesaria para la síntesis de los precursores de los ácidos nucleicos y para la producción de NADPH necesario para la síntesis de los ácidos grasos.

Finalmente, el pirofosfato de tiamina parece jugar un importante papel en la transmisión de los impulsos nerviosos. En las estructuras nerviosas, se encuentran grandes cantidades de tiamina en las membranas de los nervios periféricos, siendo necesaria para la síntesis de la acetilcolina y para algunas reacciones que tienen lugar en los tejidos neurales.

La tiamina se absorbe en el tracto digestivo mediante un transporte activo cuando se administra en dosis bajas y por difusión pasiva cuando la ingesta es > 5 mg/día. El transporte activo es inhibido por alcohol y por la deficiencia de folato, que interfiere con la multiplicación de los enterocitos. Durante el proceso de absorción, la tiamina experimenta una pirofosforilización, siendo transportada en esta forma hasta el hígado

En el plasma, la tiamina se encuentra en un 10% en estado libre o en forma de monofosfato de tiamina, unida a la albúmina y en el 90% en forma de trifosfato, siendo transportada en esta forma por los eritrocitos hasta las células de los tejidos periféricos.

En la mayor parte de los tejidos, la tiamina se encuentra en forma de trifosfato, siendo catabolizada en cada uno de ellos por fosforilasas específicas para originar monofosfato de tiamina.

La forma funcional de la tiamina es el trifosfato o cocarboxilasa que actúa como coenzima en numerosos procesos del metabolismo del piruvato y de otros ceto-ácidos. Así, la tiamina es imprescindible para la conversión del piruvato a acetil-CoA para que esta molécula penetre en el ciclo de Krebs para generar energia. También es imprescindible para la conversión de los ácidos 2-ceto-carboxílicos derivados de la metionina. treonina, isoleucina y valina.

Finalmente, la tiamina participa activamente en la producción de ribosa (una pentosa que forma parte de los nucléotidos y otras moléculas implicadas en el metabolismo intermediario)

Las necesidades diarias de tiamina establecidas por el Institute of Medicine, Food and Nutrition Board, oscilan entre los 0.2 mg/dia para los lactantess, hasta 1.4-1.5 mg/dia para las mujeres embarazadas o durante el período de lactancia (*).

La tiamina se encuentra presente en una gran cantidad de alimentos, aunque la mayor parte de los mismos contienen solo pequeñas cantidades. Los cereales son, sin duda ninguna, la mayor fuente de vitamina B1 en forma de tiamina libre. Sin embargo, como la tiamina se concentra principalmente en la cubierta de los granos de los cereales, las harinas molidas y refinidas pierden un grfan porcentaje de su continido. En los alimentos de origen animal, la tiamina se encuentra fundamentalmente en forma de trifosfato

La tiamina se destruye por el calor, la luz, la radiaciones ionizantes y la oxidación, pero se mantiene bien preservada en los alimentos congelados. La cocción destruye esta vitamina en mayor o menor proporción dependiendo del tiempo, pH, temperatura y naturaleza del agua.

REFERENCIAS

• Tolonen M. Vitaminas y minerales en la salud y la nutrición. 1995 ACRI 278 página

• Martin PR, Singleton CK, Hiller-Sturmhöfel, S. The Role of Thiamine Deficiency in Alcoholic Brain Disease. Alcohol Research & Health, 2003, Vol. 27 Issue 2, p134-143 (ref.1)