CONCLUSIONA pesar de los avances en nuestros conocimiemtos sobre su patofisiología, el diagnóstico de la embolia pulmonar es difícil.
En la mayoría de los casos la radiografía de tórax es anormal pero los hallazgos son inespecíficos. La tomografía computarizada suministra un información que no puede obtenerse con radiografías o angiografías. El típico aspecto de un infarto pulmonar en la TC puede sugerir el diagnóstico de embolia pulmonar si este no había sido previamente considerado El scaning de ventilación perfusion es bastante sensible. Un teste negativo elimina con toda seguridad la embolia pulmonar. Un scaning de alta probabilidad hace que el diagnóstico sea altamente probable pero es menos específico si los enfermos han padecido embolias previas. Todos los demás resultados no permiten un diagnóstico La angiografía sigue siendo el "patrón de oro" cuando se trata de arterias pulmonares segmentales o de gran tamaño. |