Atlas of Surgical Techniques in Periodontics. Chapter II. Atlas de Técnicas Quirúrgicas en Periodoncia

 

CONTRAINDICACIONES

Podemos hablar de tres contraindicaciones relativas a la administración de anestésicos locales, la hipertermia maligna, la colinesterasa plasmática atípica y la metahemoglobinemia. Una cuarta contraindicación absoluta, la alergia es muy poco frecuente en los anestésicos locales tipo amida, aunque se han descrito casos de alergias a los anestésicos locales tipo ester y a alguno de los preservativos empleados en la manufactura de las soluciones inyectables

Hipertermia maligna

La hipertermia maligna (HM) es una de las complicaciones más graves y peligrosas asociadas a la administración de la anestesia general, aunque afortunadamente la incidencia es de 1:50.000. Durante muchos años se pensó que la hipertermia maligna podía desencadenarse cuando los pacientes susceptibles (al parecer estos poseen un gen autosómico dominante) eran expuestos a anestésicos locales del tipo amida. Recientes publicaciones de la Malignant Hyperthermia Association americana han puesto de manifiesto que los anestésicos locales probablemente no son causantes de esta complicación y por lo tanto la hipertermia maligna es una contraindicación relativa.

La hipertermia maligna se debe a un mecanismo defectuoso de distribución del calcio mioplásmico. La elevación de la concentración de Ca++ mioplásmico explica la rigidez muscular, la acidosis metabólica y la hipertermia

¿Porqué se produce esta elevación en los enfermos susceptibles ?

Al parecer y según han demostrado Nelson y Denborough, el halotano produce un entrada de calcio en el mioplasma del músculo de los sujetos susceptibles a la HM. También se ha observado en cerdos susceptibles a la HM una salida de calcio mitocondrial mucho más elevada que en los animales normales y, esta salida es amplificada por el halotano.

Los síntomas de la hipertemia maligna son taquicardia, fiebre (aumento de la temperatura corporal que puede llegar a los 43º en pocos minutos o en unas horas), arritmias cardíacas, rigidez muscular, cianosis y la muerte. La mortalidad asociada a la HM era del 80% si bien ha sido reducida al 50% mediante tratamientos adecuados Todos los casos de HM asociados a la administración de fármacos se han desarrollado durante la anestesia general. No parece haber relación alguna entre el tipo de intervención quirúrgica y la incidencia de HM. Varios casos han sido comunicados en pacientes que recibían cuidados odontológicos.

Los agentes anestésicos asociados con casos de HM son:

  • Succinilcolina (77% de los casos)
  • Halotano (60% de todos los casos)
  • Lidocaína
  • Mepivacaína

Reconocimiento de enfermos con riesgo de hipertermia maligna

No hay preguntas previstas en los cuestionarios de la historia clínica que se refieran específicamente a la hipertermia maligna. Los enfermos con antecedentes familiares de HM deberán comunicarlo voluntariamente al médico en la primera visita. Los enfermos con antecedentes familiares de HM serán evaluados para determinar su riesgo. Usualmente se determinan los niveles de creatina-fosfokinasa (CPK) y en caso de encontrarse esta elevada mediante biopsia del cuadriceps y estudio de la contracción de la muestra en respuesta al halotano y la cafeína.

Tratamiento periodontal del enfermo con riesgo de HM

En caso de un paciente con riesgo de HM, el cirujano periodontal deberá contactar con el médico de cabecera para discutir con él sobre la conveniencia de ingresar o no al sujeto en un hospital donde pueda recurrirse a una unidad de cuidados intensivos o intervenir ambulatoriamente. En general dosis "normales" de anestésicos locales tipo amida o tipo ester pueden ser empleados para la anestesia por bloqueo nervioso o por infiltración. Entre estos agentes se incluyen la cloroprocaina y la procaína/propoxiprocaína. Pueden incluirse vasoconstrictores tanto con los esteres como con las amidas para incrementar la duración de la anestesia. En el caso de que sea necesaria la anestesia general, está podrá emplearse pero bajo estricto control.

Los agentes utilizados en sujetos susceptibles a la HM pueden ser:

  1. Anestésicos locales de tipo ester o amida
  2. Diazepam, midazolam
  3. Droperidol
  4. Barbitúricos (p.ej.tiopental)
  5. Pancuronio (como relajante muscular)

El óxido nitroso, que algunas veces se incluye entre los fármacos "seguros" debe ser evitado ya que Ellis y col han comunicado un caso de HM con este gas.

El desarrollo del dantrolen sódico, un relajante muscular hidantoínico, ha reducido drásticamente el riesgo y el tratamiento de la hipertermia maligna. El dantrolen actúa bloqueanto la liberación de calcio del retículo sarcoplásmico. Se utiliza profilácticamente en enfermos con riesgo de HM 24 horas antes de la exposición al anestésico en dosis de 4 a 7 mg/kg/día.

Colinesterasa sérica atípica

Los sustratos de esteres de colina, como la succinilcolina, un relajante muscular despolarizante y algunos anestésicos locales tipo ester, son hidrolizados en la sangre por la enzima plasmática colinesterasa, producida por el hígado. Alrededor de 1 entre 2800 personas tiene una colinesterasa defectuosa, que metaboliza más lentamente las sustancias antes señaladas. La acumulación de succinilcolina, que se utiliza para facilitar la intubación en la anestesia general puede ocasionar apnea que puede prolongarse durante varias horas y requerir una ventilación asistida.

La determinación de una colinesterasa atípica se debe llevar a cabo en los familiares de todo sujeto que halla mostrado tal anomalía. Ello se lleva a cabo determinando el índice de dibucaína en el plasma, un parámetro que indica la velocidad de metabolización de esta sustancia. Mientras que el índice normal oscila entre 66 y 86 una colinesterasa atípica dará un valor de 20 o menos unidades. Una colinesterasa atípica es "una contraindicación relativa" al uso de anéstesicos locales tipo ester. Estos serán sustituídos por sus homológos de tipo amida que, al ser metabolizados por el hígado, no pueden acumularse en la sangre.

Metahemoglobinemia

La metahemoglobinemia es una condición en la cual se desarrolla un estado cianótico sin que existan anomalías cardíacas o respiratorias. La metahemoglobinemia puede producirse por problemas congénitos de metabolismo o puede ser inducida por algunos fármacos.

Dos anestésicos locales, la articaína y la prilocaína, en dosis altas, pueden producir metahemoglobinemia. Por lo tanto, la administración de estos dos anestésicos a sujetos con metahemoglobinemia congénita y otros síndromes que afectan la capacidad de oxigenación de la sangre debe ser evitada