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CEREBELO
El cerebelo
es un órgano presente en todos los vertebrados,
pero con diferentes grados de desarrollo: muy reducido en los peces,
reptiles y pájaros, alcanza su máximo desarrollo en los
primates y en el hombre .
Está formado
esencialmente por tres partes: una central, llamada lóbulo medio, y
dos laterales, que constituyen los lóbulos laterales o hemisferios cerebelosos . La superficie
externa del cerebelo no es lisa, sino que está interrumpida por numerosos
surcos que dividen a cada lóbulo en muchos lobulillos (lóbulo de la
amígdala, del flóculo, lóbulo cuadrado, etc.);
otros más numerosos y menos profundos, son las láminas del cerebelo
que dan a la superficie un característico aspecto estriado
Como
las demás partes del sistema nerviosos central , el cerebelo está formado por la sustancia
blanca y la sustancia gris.
- La
sustancia blanca, formada por haces de fibras mielínicas (la fibra
mielínica es el cilindroeje de una célula nerviosa, revestido de una
vaina de mielina), está dispuesta en el centro del órgano, donde constituye
el cuerpo o centro medular
.
- La
sustancia gris, constituida fundamentalmente por las células nerviosas
y sus prolongaciones carentes de capa de mielina, está dispuesta principalmente
en la periferia, donde forma la corteza cerebelosa,
La
corteza cerebelosa tiene un espesor de 1
mm. Se distinguen dos capas bien diferenciadas: una externa, de color
gris claro, llamada capa molecular, y otra interna, de color amarillo
rojizo, denominada capa granulosa; entre éstas se interpone una delgada
capa constituida por gruesas células nerviosas, de aspecto bastante
característico: las células de Purkinje
El cerebelo
resulta esencial para coordinar los movimientos del cuerpo. Es un centro
reflejo que actúa en la coordinación y el mantenimiento del equilibrio.
El tono del músculo voluntario, como el relacionado con la postura y
con el equilibrio, también es controlado por esta parte del encéfalo.
Así, toda actividad motora, desde jugar al fútbol hasta tocar el violín,
depende del cerebelo.
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Tronco
del encéfalo
El tronco
del encéfalo está dividido anatómicamente en: mesencéfalo o cerebro
medio, la protuberancia y el bulbo raquídeo
Protuberancia
o puente
Situada
entre el bulbo raquídeo y el mesencéfalo, está localizada enfrente del
cerebelo. Consiste en fibras nerviosas blancas transversales y longitudinales
entrelazadas, que forman una red compleja unida al cerebelo por los
pedúnculos cerebelosos medios. Este sistema intrincado de fibras conecta
el bulbo raquídeo con los hemisferios cerebrales. En la protuberancia
se localizan los núcleos para el quinto, sexto, séptimo y octavo (V,
VI, VII y VIII) pares de nervios craneales.
Bulbo
raquídeo o médula oblongada
Situado
entre la médula espinal y la protuberancia, el bulbo raquídeo
constituye en realidad una extensión, en forma de pirámide, de la médula
espinal.
Los impulsos entre la médula
espinal y el cerebro se conducen a través del bulbo raquídeo por vías
principales de fibras nerviosas tanto ascendentes como descendentes. También se localizan los centros de control de las funciones cardiacas,
vasoconstrictoras y respiratorias, así como otras actividades reflejas,
incluido el vómito. Las lesiones de estas estructuras ocasionan la muerte
inmediata.
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Sistema
límbico
Formado
por partes del tálamo, hipotálamo, hipocampo, amígdala, cuerpo calloso,
septum y mesencéfalo, constituye una unidad funcional del encéfalo .
El sistema límbico mantiene estrechas interacciones bioquímicas
y nerviosas con la corteza cerebral, considerándosele como el
elemento encefálico encargado de la memoria, las emociones, la
atención y el aprendizaje
La amígdala
está vinculada al comportamiento agresivo, el hipocampo a la
memoria, y el septum pelucidum al placer. El giro cingulado y la comisura
anterior cumplen una función de comunicación entre las
distintas partes. Los cuerpos mamilares también cumplen una función
de comunicación e intervienen de forma decisiva en los mecanismos
de la memoria.
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Pares
craneales
Hay doce
pares de nervios craneales, simétricos entre sí, que salen de la base
del encéfalo . Se distribuyen a lo largo de las diferentes estructuras
de la cabeza y cuello y se numeran, de adelante hacia atrás, en el mismo
orden en el que se originan. Las fibras motoras controlan movimientos
musculares y las sensitivas recogen información del exterior o del interior
del organismo.
Los nervios
cervicales, en número de 8 pares, proceden todos ellos de la
médula espinal. Todos ellos posee cuatro tipos de fibras: motoras
somáticas, efectivas viscerales, sensitivas somáticas
y sensitivas viscerales.
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Vascularización
El oxígeno
y la glucosa llegan a las células nerviosas por dos pares de arterias
craneales. Justo debajo del cuello, cada una de las dos arterias carótidas
comunes se divide en una rama externa, la carótida externa que lleva
sangre a la parte externa craneal, y una rama interna, la carótida interna,
que lleva sangre a la porción anterior del cerebro. Las dos arterias
vertebrales se unen formando la arteria basilar, que irriga la parte
posterior del cerebro. A nivel de la base del cerebro existe un sistema
denominado círculo de Willis que une ambos sistemas y sirve como
compensación si se obstruye alguna de las arterias
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