GASTROENTEROLOGIA

K29 GASTRITIS

GENERALIDADES Y CLASIFICACIONES

Las gastritis forman un grupo heterogéneo de procesos clínico-patológicos en los cuales no existe una correlación sintomático-lesional. Ello ha hecho que existan un sinnúmero de clasificaciones atendiendo unas veces a criterios clínicos, fisiopatológicos, histológicos, endoscópicos., etc. En 1990 el Congreso Mundial deGastroenterología, dio lugar a la conocida clasificación de las gastritis por el "Sistema Sydney" (*) .

Otros autores prefieren la clasificación más sencilla de las gastritis en:

  • Gastitis erosiva y hemorrágica
  • Gastritis no erosiva
  • Gastritis distintiva

o una clasificación basada en la patogenia y contextos clínicos en los que se presentan (*)

Distribución de las gastritis

Desde el punto de vista topológico, las zonas en las que se originan las gastritis son (*)

  • Zona del glándulas antrales: la mucosa del antro consiste en glándulas oxínticas y antrales y ocupa el antro anatómico
  • Zona oxíntica: la mucosa de las glándulas oxínticas ocupa tanto el fundus como el cuerpo del estómago
  • Zona de glandulas cardiacas: esta zona ocupa pocos centrímetros por debajo de la unión escamocilíndrica. Sus glándula mucosas tienen mezla de glándulas oxínticas mecladas con células parietales. Usualmente, la gastritis de esta zona va asociada a la del resto de estómago (pangastritis). La inflamación del cardias ha despertado ultimamente un gran interés cuando es conveniente la verificación histológica de una enfermedad por reflujo esofágico
  • La gastritis atrófica multifocal comienza en la región de la incisura a lo largo de la curvatura menor y se extiende proximal y distalmente.

Endoscopia: con frecuencia existe discordancia entre los aspectos endoscópicos e histológicos en las gastritis. Asimismo, no hay ningún cuadro clínico que se correlacione con las lesiones que caracterizan histológicamente a las gastritis. Antes al contrario, muchos pacientes con dispepsia persistente presentan una morfología gástrica normal.

La gastritis superficial se caracteriza por la existencia de edema y eritema mucoso, fundamentalmente a nivel antral, aunque puede verse también en otras zonas. A estos hallazgos se les puede sumar la presencia de pequeñas erosiones de diferente morfología, y cierto grado de exudado fibrinoso definido como "antro urticariforme". (*)

La gastritis atrófica tiene como propiedad más destacada es la visualización de los vasos submucosos, en relación con el adelgazamiento mucoso que conlleva la atrofia. La histología (*) suele ser confirmativa en cerca del 80% de los casos cuando la afectación macroscópica parece difusa, pero no es así si sólo el fundus presenta signos endoscópicos de atrofia. La importancia de la gastritis atrófica viene dada por su condición de lesión precancerosa, en el sentido de una mayor incidencia de neoplasias en pacientes con hallazgos previos de atrofia, sobre todo si llevan unida la existencia de displasia celular (*)

En las gastritis hipertróficas, solamente puede asumirse como talla poco frecuente enfermedad de Ménétrier, en la que curiosamente predomina la hiperplasia mucosa sobre la hipertrofia, sobre todo de las células mucosecretoras, existiendo asimismo dilataciones quísticas de las glándulas gástricas. Estos datos condicionan los hallazgos endoscópicos caracterizados por la existencia de pliegues cerebroides, ocasionalmente nodulares o polipoides, con hiperproducción mucosa; hallazgos que son más frecuentes en fundus, y raros en el antro. La macrobiopsia (*) es fundamental para el diagnóstico histológico. Otros cuadros incluidos entre las gastritis hipertróficas, como la hiperplasia folicular linfoide, o "état mamelonné", relativamente raro y caracterizado por múltiples nódulos de la mucosa, ni tienen traducción clínica ni la histología está siempre alterada.

La gastritis linfocítica es un cuadro que responde a hallazgos histológicos (*) . La gastritis erosiva crónica, o varioliforme, es una entidad que la OMED aconseja denominar como pápulas gástricas mútiples, o gastropatía pápulo-erosiva. Se trata de la existencia de múltiples lesiones antrales, de aspecto nodular, umbilicadas y/o erosionadas en el centro, sin un claro mecanismo etiopatogénico, en el que se ha involucrado a un cierto tipo de alergia, y que pueden producir dolor y ardor crónicos, habiendo casos asintomáticos. Se ve con relativa frecuencia, y responde bien a diversos tratamientos desde el punto de vista sintomático (antiH2, omeprazol, sucralfato, antiácidos, etc.), pero escasamente desde el punto de vista morfológico.

En cuanto a la gastritis por reflujo de bilis y contenido intestinal, más frecuente en pacientes operados, sobre todo en los que se les elimina el píloro o se les hace gastroenteroanastomosis, decir que tiene un patrón histológico más o menos característico, y consistente en hiperplasia foveolar, edema y congestión de la lamina propia, pero ninguno diferenciador desde el punto de vista endoscópico.

En la gastritis por AINES, pueden observarse desde erosiones hasta úlceras, pero sin ninguna peculiaridad que las pueda distinguir de las debidas a otras causas.

Erosiones

Las erosiones son "lesiones epiteliales superficiales, que se desarrollan a nivel de la capa glandular, y que nunca irrumpen en la muscularis mucosae". Según la clasificación de Murakami (*) de las lesiones excavadas, en función de la profundidad de la pérdida de sustancia, las erosiones corresponden al estadio I, mientras que los estadios II, III y IV son las úlceras.

  • Endoscopia

    Desde el punto de vista endoscópico, el término erosión ha sido empleado para referirse a un variado tipo de lesiones en que se veía, o sospechaba, una pérdida de sustancia de la mucosa. Sin embargo, muchas veces no existe una correlación entre el diagnóstico endoscópico y lo que se entiende por erosión histológicamente. El comité de expertos de la OMED aconseja no utilizar el término de erosión si un sangrado activo impide ver completamente la lesión, o bien si hay dudas sobre la posible pérdida de sustancia, recomendando, por otra parte, emplear el término "fisura" o "grieta" para las pérdidas de sustancia lineal (*). La OMED recomienda el empleo del vocablo erosión solamente en dos situaciones: para hablar de las erosiones hemorrágicas (antiguas "erosiones hemorrágicas") y como nombre genérico para todas las lesiones mucosas excavada.

  • Histología

    Con el empleo del endoscopio no es posible predecir la profundidad de la erosión de forma confiable y, aunque en general la biopsia no es necesaria, algunas veces conviene verificar las lesiones de aspecto vascular antes de un tratamiento hemostático endoscópico. Histológicamente, las lesiones muestran una pseudomembrana que subyace a una base hialina (1). Los cambios más notables son las intensas anormalidades epiteliales y la hiperplasia de las criptas.

 

REFERENCIAS

1. Laine L, Weinstein WM Laine . Histology of alcoholic hemorrhagic "gastritis": a prospective evaluation. Gastroenterology 1988 Jun 94:6 1254-62