ALLEN, Frederick M. (1879-1969

La experimentacion de la diabetes comenzó para Allen con sus primeras investigaciones en animales. Ya en 1913 y tras tres años de estudiar la enfermedad, publica «Estudios sobre la glucosuria y la diabetes», una obra que va a revolucionar el tratamiento de la enfermedad. Trabajando con perros llegó a la conclusión que la mejor dieta para el tratamiento de la diabetes era la más baja posible en calorías. Poco después de llegar a este convencimiento, la puso en práctica con sus pacientes.

En 1919 publica «Regulación de la dieta total para el tratamiento de la diabetes», donde cita de forma exhaustiva setenta y seis informes de los cien enfermos que había observado. Allen defendía ardientemente que la dieta de hambre y el ejercicio físico eran los mejores métodos de curación. Esta dieta producía en los enfermos una disminución de los niveles de glucosa en sangre y una reducción de los síntomas. La vida de los pacientes se prolongaba así durante unos meses, pero de una forma muy dolorosa, que se veía agravada en ocasiones si el paciente adquiría una infección, ya que la dieta se hacía aún más estricta. De hecho, muchos diabéticos preferían abandonar el tratamiento y resignarse a su fatal destino.

En 1919-1920 Allen establece la primera clínica para tratar enfermos diabéticos, el Instituto Psiquiátrico de New Jersey. En esta institución, a la que acudían enfermos adinerados y muy desesperados, también se atendían pacientes con hipertensión arterial y con la enfermedad de Bright. Una enfermera del Instituto Psiquiátrico de Allen describía a los pacientes del centro como un auténtico batallón de muertos vivientes: grandes vientres, cuellos de piel y hueso, caras esqueléticas y movimientos lentos; de todas las edades y de ambos sexos. Además, y para ayudar a los pacientes a sobrellevar el tratamiento, se les administraba opio. Este tratamiento, aparentemente draconiano y cruel, fue, sin embargo el único camino para prolongar la vida de muchos diabéticos que llegaron a alcanzar el año 1992, y se beneficiaron del descubrimiento de la insulina. Con ella sí llegaron a sobrevivir muchos años.