Las anormalidades vasculares se subclasifican según los componentes estructurales básicos afectados: capilares, venosos, linfáticos, arteriales y mixtos. Además, también se clasifican según la reologia vascular en lesiones correspondientes a flujo lento (linfaticas, venosas) de las correspondientes a flujo rápido (arteriales, mixtas).

Desde hace unos pocos años, muchos de los términos antes utilizados han sido abandonados en favor de esta nueva clasificación. Así, por ejemplo, los angiomas fresa y los angiomas capilares son ambos hemangiomas superficiales de la infancia. Los hemangiomas cavernosos se han utilizado para definir los hemangiomas profundos y las malformaciones venosas. Las manchas salmón y el nevus flammeus no se deben incluir entre las malformaciones capilares ya que se trata de ectasias que usualmente desaparecen.