SANACION A DISTANCIA
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PRUEBAS CIENTIFICAS DE LA CURACION A DISTANCIA Mientras que muchas personas todavía se preguntan si la sanación a distancia es una superstición, numerosas investigaciones científicas ya han demostrado unos resultado bastante positivos sobre este tema. Achterberg y col (2005) han realizado un estudio para investigar si se producía algún tipo de interconexión entre el envío de un pensamiento sanador y la recepción del mismo por un paciente. En este estudio, utilizando la tecnología de resonancia magnética funcional (RMNf), se demostró que la intencionalidad distante (ID), definida como el envío de pensamientos a distancia, está correlacionada con una activación de ciertas funciones cerebrales en los receptores. Once curanderos que supuestamente podían conectar o curar a distancia fueron reclutados de la isla de Hawai. Cada curandero seleccionó a una persona con la que sentía una conexión especial como receptor de la ID. El receptor fue colocado en el escáner de RMNf y aislado de todas las formas de contacto sensorial del curandero. Los curanderos enviaron formas de ID que se relacionaban con sus propias prácticas de curación en intervalos aleatorios de 2 minutos que eran desconocidos para el destinatario. Se encontraron diferencias significativas entre los procedimientos experimentales (SEND) y control (no SEND) (p = 0,000127). Las áreas activadas durante los procedimientos experimentales incluyeron el área cingulada anterior y media, el precuneus, y el área frontal. Se concluyó que las instrucciones a un curandero para hacer una conexión intencional con una persona aislada sensorialmente pueden correlacionarse con los cambios en la función cerebral de ese individuo. En los últimos años, varios ensayos clínicos han evaluado los efectos de la curación distante. La pregunta básica planteada por estos estudios era si una intención distante positiva podía estar relacionada con algún resultado en una persona destinataria. Se han detectado 11 estudios con 576 sesiones y diseño casi idéntico, llevados a cabo en tres continentes distintos. Los parámetros del estudio fueron extraídos y combinados con un modelo de efectos aleatorios. La hipótesis del efecto positivo de intenciones benévolas fue apoyada por los resultados obtenidos. Además de una sensación subjetiva por parte de los pacientes, en dos de los estudios se utilizó la determinación de la actividad electrodérmica con resultados idénticos. Se concluye que especialmente el aspecto intencional común puede ser responsable de estos hallazgos poco ortodoxos. Estos hallazgos pueden tener implicaciones para la investigación de sanación distante y el cuidado de la salud, así como para el desempeño de la meditación. Algunos relacionan estos hechos con algunos de los hallazgos conocidos desde hace décadas por los físicos teóricos, un fenómeno que el mismísimo Einstein calificó de "escalofriante acción a distancia" y que hoy se conoce como entrelazamiento cuántico. De acuerdo con el análisis estándar del entrelazamiento cuántico, dos fotones (partículas de luz) que nacen de una misma fuente coherente estarán entrelazados; es decir, ambas partículas serán la superposición de dos estados de dos partículas que no se pueden expresar como el producto de estados respectivos de una partícula. En otras palabras: lo que le ocurra a uno de los dos fotones influirá de forma instantánea a lo que le ocurra al otro, dado que sus distribuciones de probabilidad están indisolublemente ligadas con la dinámica de ambas. Este hecho, que parece burlar el sentido común, ha sido comprobado experimentalmente, e incluso se ha conseguido el entrelazamiento triple, en el cual se entrelazan tres fotones. Un pensamiento sanador, como cualquier otro pensamiento, refleja una actividad neuronal, caracterizada por una señal electromagnética (una onda) de muy baja frecuencia, del orden de unos pocos herzios. Todo onda se caracteriza por su dualidad particula-onda, particulas que, en el caso de los seres vivos se denominan biofotones. Durante un pensamiento sanador, se generan pares de biofotones entrelazados, que pueden estar distantes millones de kilometros ya que matemáticamente los físicos han llegado a la conclusión de que la información contenida en un biofotón llega instantáneamente al fotón con el que está entrelazado. Hay otros ejemplos de casos en los que dos o varios sistemas próximos experimentan un entrelazamiento cuántico y se sincronizan entre sí. Por ejemplo, si se colocan dos relojes de péndulo uno cerca del otro e inicialmente están desfasados, al cabo de un cierto tiempo, los relojes se sincronizan y marchan al unísono. Otro ejemplo, algo más misterioso, es lo que ocurre en los dormitorios de los colegios femeninos o en las residencias universitarias. Al comienzo, los ciclos menstruales de las señoritas son completamente dispares, pero al cabo de unos meses, se sincronizan unos con otros con un margen de un par de dias. De igual manera, si de utilizan las frecuencias de un hígado sano o de un potente sistema inmune y se transmiten a un cuerpo en el que estos sistemas están enfermos, en unos pocos días gracias a entrelazamiento cuántico las frecuencias del organismo enfermo recuperan la normalidad. Las máquinas radiónicas, y en particular las máquinas de Rife cuando funcionan a distancia, están basadas en este mecanismo cuántico. Algunas de las máquinas de Rife comerciales están preparadas para funcionar en modo contacto (las frecuencias generadas son transmitidas por electrodos en contacto con la piel de paciente) o en modo remoto. Para ello, se coloca una muestra de tejido del paciente (sangre, saliva, uñas, etc) que debe contener el ADN que, al ser una doble hélice, actúa como una antena de las llamadas ondas escalares u ondas Tesla. Para transmitir estas ondas, se ha desarrollado un dispositivo que, esencialmente consta de una bobina plana doble con un potente imán de neodimio. La hipótesis manejada por los expertos en radiónica es que las frecuencias emitidas por el DNA de una muestra pueden ser recibidas por el DNA del sujeto de forma instantánea. Si estas frecuencias son sanadoras, el sujeto experimentará la sanación.
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REFERENCIAS
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Monografía revisada el 27 octubre 2017. Equipo de redacción de IQB
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