MENOPAUSIA

FITOESTRÓGENOS Y CÁNCERES DE PRÓSTATA Y DE COLON

 

 

INTRODUCCION

La muerte debido al cáncer es la segunda causa de muerte en los países occidentales, si bien la incidencia de esta enfermedad varía de unos países a otros. Se cree que la incidencia del cáncer esta influenciada en gran medida por los hábitos de vida y la dieta. Los cánceres de próstata y de colon afectan a un buen número de hombres, habiendose sugerido que aproximadamente el 70-75% de los mismos se pueden evitar mediante medidas dietéticas apropiadas. Una de estas medidas es el consumo regular de productos derivados de la soja. En efecto, la incidencia del cáncer de próstata en sus primeros estadios es similar en todos los países del mundo, pero las muertes por esta causa son 17 veces más elevadas en los EE.UU y en otros países occidentales que en China. En Japón, las muertes por cáncer de próstata son menos de un tercio de las que se producen en los EE.UU. Un importante estudio epidemiológico publicado en 1998 que analizaba factores socioecómicos y nutricionales de 42 países en relación con el cáncer de próstata encontró que el factor nutritivo protector más importante era la soja y sus derivados. De igual forma un estudio prospectivo en más de 2.500 sujetos con cancer de prostata encontró que la incidencia de esta cáncer era un 70% entre los individuos consumidores regulares de leche de soja.

En el caso del cáncer de colon, aunque hay una percepción generalizada de que los derivados de la soja tienen un efecto protector, no hay estudios clínicos convincentes que la apoyen

ESTUDIOS DE LABORATORIO

Estudios en cultivos de células y en animales han aportado numerosas evidencias de que la soja puede proteger frente al cáncer de próstata. Así, por ejemplo, la adición de soja a la dieta protege a las ratas del cáncer de próstata, tanto el espontáneo como el inducido por productos carcinógenos.

Se han publicado los resultados de varios estudios "in vitro" bien con extracto de soja, bien con las tres isoflavonas más importantes, daidzeina, genisteína y gliciteína. Xiang y col (2003) utilizaron varios tipos de líneas celulares como LNCap (células fibroblastoides adherentes que crecen como agregados procedentes de la metástasis en un nodo linfático clavicular de un carcinoma prostático humano de un hombre de 50 años, sensibles a los andrógenos) y DU-145 (procedentes de un cáncer de próstata, negativas para los receptores androgénicos), además de otras células procedentes de tumores de mama (MCF-7 y otras). Lo más destacado de trabajo de Xiang fué el ensayar además de las tres isoflavonas citadas, los productos que originan al metabolizarse en el hombre. Tal y como estos autores esperaban, la genisteína inhibió el crecimiento de todas las líneas celulares ensayada oscilado las concentraciones inhibitorias 50 (IC50) entre 26 y 45 mMol/L. La daidzeina y la gliciteína fueron menos activas. Pero, lo que es más importante, el metabolito principal de la genisteína [1-(2,4- dihidroxibenzoil)-1-(4-hidroxifenil) etileno](M1 *) mostró una actividad entre 6 y 10 veces mayor que el producto de partida. Además, las concentraciones inhibitorias 50 frente a las dos líneas de células prostáticas fueron similares (4.0 y 6.3 mM/L para las células positivas y negativas para los receptores androgénicos, respectivamente), lo que indica que la acción antitumoral del metabolito M1 no está relacionada con los receptores androgénicos, al menos en su totalidad.

Se ha intentado explicar los efectos antitumorales de la genisteína y de otras isoflavonas argumentando que estas sustancias se unen al receptor estrogénico ERb, lo que reduciría el número de receptores androgénicos (existe un equilibrio entre ambos tipos de receptores: reduciendo la actividad de unos, se reducen los otros). Esto es posible que ocurra en los primeros estadios del cáncer de próstata, que son testosterona dependientes, pero en estadios más avanzados deben intervenir otros mecanismos independientes de los andrógenos.

En modelos animales de cáncer de próstata más agresivos, transplantando células tumorales a ratas y ratones, la adición de un suplemento de soja a la dieta ocasiona una modesta reducción del crecimiento del tumor, reducción que es mucho mayor cuando se administra a los animales un extracto concentrado de soja, y todavía mayor, cuando se inyecta subcutáneamente genisteína

ESTUDIOS CLINICOS

Aunque se han publicado muchos estudios clínicos, la mayor parte de ellos presentan una serie de deficiencias que hacen que la interpretación de los resultados sea difícil (falta de controles, no especifican las cantidades de isoflavonas, etc) .

Dos estudios han utilizado el PSA (antígeno específico de la próstata) como parámetro para medir la estabilización, reducción y progresión del tumor.

En uno de ellos, 34 sujetos mayores de 65 años con el PSA elevado, consumieron dos bebidas conteniendo 20 g de proteína de soja, una de ellas equivalente a 42 mg de genistein + 27 mg. daidzeina por día mientras que la segunda era equivalente a 2.1 + 1.3 mg por día de estas isoflavonas. Ninguno de ellos padecía cáncer de próstata. Los sujetos consumieron ambas bebidas durante 6 semanas, al final de las cuales fueron cruzados, siendo asignados aleatoriamente a una u otra. Se determinaron antes y después de cada período el PSA, el colesterol y el P105, un marcador de un protooncogen. En este estudio, las concentraciones de colesterol fueron reducidas por la bebida más rica en isoflavonas, independientemente de que fuera consumida en primer o segundo lugar, pero no se observaron modificaciones del PSA

En el segundo estudio participaron 41 pacientes con cáncer de próstata confirmado, de los cuales 18 eran sensibles al tratamiento hormonal (grupo II) 19 resistentes (grupo III) (los 4 restantes no habían recibido tratamiento previo - Grupo I). Se administró durante un período entre 3 y 6 meses, 100 mg de isoflavonas contenidas en un extracto de soja. Aunque no se manifestaron descensos del PSA, en el 83% de los pacientes del grupo II el PSA se estabilizó, siendo el 35% los pacientes estabilizados del grupo III. Los autores concluyen que "un número significativo de pacientes se beneficiaron del consumo de soja aún cuando tratamientos quirúrgicos, hormonales o radioterápicos previos no habían conseguido estabilizarles.

Si dos estudios anteriores muestran que la soja y sus derivados no afectan al PSA o sólo impiden su aumento una vez establecido el cáncer de próstata, el llamado "Adventist Health Study" (un estudio prospectivo realizado en 12.295 sujetos pertenecientes a la secta Adventista del Septimo Día) mostró que el consumo de leche de soja estaba asociado a un 70% de reducción del riesgo del cancer de próstata

En abril de 2003, Messina publicó una revisión exhaustiva de los estudios clínicos realizados con la soja (en cualquiera de sus formas) analizando los defectos y los resultados de los mismos. Este autor divide los estudios realizados en el hombre en ecológicos, con casos controlados, prospectivos y clínicos. En su artículo, Messina concluye:

"Claramente hay mecanismos hormonales y no hormonales por los cuales la soja, que es una notable fuente de isoflavonas, puede suprimir el desarrollo y/o crecimiento de los tumores de próstata"...

".. los resultados más imprsionantes son los del estudio que muestran que los suplementos de isoflavonas disminuyen el crecimiento de los niveles de PSA en pacientes con cáncer de próstata tratado pero incontrolado. Aunque se trata de un estudio piloto con pocos casos, los hallazgos son impresionantes por dos motivos: 1º) los efectos beneficiosos fueron evidentes en enfermos en los que habían fracasado otros tratamientos y 2º) las dosis de isoflavonas (100 mg) no fueron mucho mayores que las que se recomiendan a la población general y sólo un poco más del doble de las que consumen los chinos o japoneses en su dieta..."

.."los datos existentes hasta la fecha indican que las personas preocupadas por la salud de su próstata deben considerar incorporar la soja a su dieta.."

PC-SPES

PC-SPES es el nombre de una mezcla (*) de plantas medicinales comercializada en 1996 a la que se está prestando mucha atención desde que se publicaron los resultados de varios estudios clínicos realizados en pacientes con cáncer de próstata avanzado.

PC-SPES ha mostrado poseer una potente actividad estrogénica tanto in vitro como in vivo. Una dilución 1:200 de un extracto etanólico produjo los mismos efectos que el estradiol 1 nM en el ensayo de actividad transcripcional en levaduras. De igual forma, ratones CD1 tratados con PC-SPES mostraron una mayor peso uterino en comparación con los controles. En células tumorales derivadas de carcinomas de próstata, PC-SPES inhibió la proliferación celular aumentando la apoptopsis y disminuyendo los niveles del antígeno nuclear de las células en proliferación, un marcador del índice mitótico.

El uso de PC-SPES como suplemento dietético en hombres con cáncer de próstata ha sido evaluado en varios estudios clinicos. Todos ellos han observado reducciones del PSA (antígeno específico de la próstata) que, en algunos casos, alcanzaron la normalidad, si bien no se han reportado cambios en el crecimiento del tumor. Al discontinuar el tratamiento con PC-SPES, los niveles de PSA volvieron a elevarse. Los efectos secundarios fueron ginecomastia y algún caso aislado de trombosis superficial.

El PC-SPES (y otras formulaciones similares que han aparecido rápidamente en el mercado) ha sido duramente criticado por varias razones: la presunta incorporación fraudulenta de estrógenos sintéticos, y de otras sustancias, incluso denunciada por la propia FDA, con la subsiguiente retirada del mercado del producto por su fabricante en 2002), la falta de homogeneidad de los diferentes lotes y la progresiva reducción de su actividad estrogénica. Algunos detractores han argumentado que la eficacia de PC-SPES se debía a su contenido en estrógenos (lo que podría explicar la ginecomastia). Las cantidades detectadas de dietilestilbestrol (en algunos lotes) fueron del orden de 10 a 100 mg/capsula de PC-SPES (recordemos que las dosis utilizadas de dietilestilbestrol en el tratamiento del cáncer de próstata eran de 3 mg/dia)

Para añadir más confusión al tema del PC-SPES, los resultados de un estudio aleatorizado cruzado en 90 pacientes con cáncer de próstata independiente de andrógenos en el que administraron 3 mg/día de etilestilbestrol o 3 cápsulas de PC-SPES mostraron un 40% de reducción o de estabilización de los niveles de PSA en los pacientes tratados con PC-SPES y un 24% en los tratados con el estrógeno. Este estudio fué terminado prematuramente al retirarse el producto del mercado.

Caben ahora las siguientes preguntas:

  • ¿Como es que el PC-SPES, aún conteniendo entre el 0.01 y el 3.1% de la la dosis de etilestilbestrol sigue produciendo mejores resultados que los estrógenos?
  • Si el mecanismo de acción del PC-SPES es a través los receptores androgénicos ¿como es que es eficaz frente a tumores hormono-independientes?
  • ¿Y que hay de los remedios chinos que vienen usándose durante siglos que participan en la fórmula del PC-SPES? No cabe la menor duda de que algunos de los integrantes de las cápsulas de PC-SPES (p.ej, la scutellaria baicalensis) tiene actividades antitumorales. Si esto es así ¿porqué no se menciona el cáncer de próstata en ninguno de los libros de Medicina China Tradicional ?
  • Se han detectado en diferentes lotes de PC-SPES además del dietilestilbestrol, etinilestradiol, alprazolam y warfarina. ¿Habrá algún otro producto sintético no detectado?

 

 

REFERENCIAS

  • H Xiang, G Schevzov, P Gunning, HM Williams y M Silink:A Comparative Study of Growth-Inhibitory Effects of Isoflavones and Their Metabolites on Human Breast and Prostate Cancer Cell Lines. Nutrition and Cancer (2002) 42(2), 224–232
  • H.S. Pandha and R.S. Kirby: PC-SPES: phytotherapy for prostate cancer. Lancet 6/29/2002, Vol. 359, Fascículo 9325
  • Hebert JR, Hurley TG, Olendzki BC, Teas J, Ma YS, Hampl JS. Nutritional and socioeconomic factors in relation to prostate cancer mortality: a cross-national study. Journal of the National Cancer Institute. 1998;90:1637-1647.
  • RS DiPaola, H Zhang, GH Lambert, R Meeker, E Licitra, MM Rafi, BT Zhu, H Spaulding, S Goodin, MB Toledano, WN. Hait, y MA. Gallo: Clinical and Biologic Activity of an Estrogenic Herbal Combination (PC-SPES) in Prostate Cancer. N. Eng. J. Med, 1998 Volume 339 (12) :785-791
  • SC Dixon, KB. Knopf y WD Figg. The Control of Prostate-Specific Antigen Expression and Gene Regulation by Pharmacological Agents. Pharmacological Rev., March 2001 Vol. 53, Issue 1, 73-92
  • Jacobsen BK, Knutsen SF, Fraser GE. Does high soy milk intake reduce prostate cancer incidence? The Adventist Health Study (United States). Cancer Causes Control. 1998 Dec;9(6):553-7.
  • Mark J. Messina: Emerging Evidence on the Role of Soy in Reducing Prostate Cancer Risk. Nutrition Reviews Abril 2003), Vol. 61, No. 4: 117-131
  • Oh WK, Kantoff PW, Weinberg V, Jones G, Rini BI, Derynck MK, Bok R, Smith MR, Bubley GJ, Rosen RT, DiPaola RS, Small EJ. Prospective, multicenter, randomized phase II trial of the herbal supplement, PC-SPES, and diethylstilbestrol in patients with androgen-independent prostate cancer. J Clin Oncol. 2004 Sep 15;22(18):3705-12
  Monografía creada 2 de octubre de 2004